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Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT)

Foto del escritor: dr.ssa Elizabeth Mooredr.ssa Elizabeth Moore

Rappresentazione di una scena drammatica con una macchina e un edificio in fiamme, simboleggiando il trauma e il Disturbo da Stress Post-Traumatico

El trastorno de estrés postraumático (TEPT) es una condición psicológica compleja que puede desarrollarse tras experiencias traumáticas como accidentes, abusos o eventos bélicos. Este trastorno puede tener un impacto significativo en la vida diaria de una persona, afectando su bienestar mental, emocional y físico. En este artículo analizamos las características del TEPT, sus orígenes, manifestaciones y las terapias psicológicas utilizadas para tratarlo.


¿Qué es el Trastorno de Estrés Postraumático?

El TEPT es una reacción psicológica a un evento traumático que ha amenazado la vida o la integridad física de una persona. Estos eventos pueden incluir agresiones físicas, accidentes graves, desastres naturales o experiencias de guerra.El TEPT se manifiesta a través de una serie de síntomas que se pueden clasificar en cuatro categorías principales: intrusiones, evitación, alteraciones del estado de ánimo y reactividad aumentada.


Manifestaciones del Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT)

Intrusiones

Las intrusiones son uno de los síntomas principales del TEPT y pueden presentarse como pensamientos, recuerdos o sueños recurrentes e indeseados sobre el evento traumático. Estos episodios pueden ser angustiantes, provocando intensas respuestas emocionales y físicas.Por ejemplo, una persona que ha sufrido un accidente automovilístico podría revivir el incidente de manera vívida mediante flashbacks durante el día o pesadillas que interrumpen el sueño.Las intrusiones pueden ser desencadenadas por estímulos aparentemente inocuos, como un sonido similar al oído durante el trauma o una escena que recuerde al evento traumático.


Evitación

La evitación es otra característica común del TEPT e implica el esfuerzo consciente de evitar situaciones, lugares, personas o actividades que puedan recordar el evento traumático. Este comportamiento puede volverse muy limitante, impidiendo a la persona participar en actividades cotidianas normales.Por ejemplo, un veterano de guerra podría evitar lugares concurridos o ruidosos que le recuerden el campo de batalla, mientras que una víctima de violencia sexual podría evitar relaciones íntimas o lugares similares al sitio donde ocurrió el abuso.La evitación también puede incluir la negativa a hablar sobre el trauma o enfrentar las emociones asociadas al evento, lo que lleva a un aislamiento emocional y social.


Alteraciones del Estado de Ánimo

Las alteraciones del estado de ánimo incluyen una gama de emociones negativas persistentes que interfieren en la vida diaria, como:

  • Culpa: Sentimientos de responsabilidad por el evento traumático, incluso sin una razón lógica.

  • Vergüenza: Sensación de estar "defectuoso" o "manchado" debido a la experiencia traumática.

  • Ira: Irritabilidad o explosiones de cólera, dirigidas hacia uno mismo o hacia otros.

  • Tristeza: Una sensación profunda y persistente de desesperanza o desánimo.

Estas alteraciones emocionales pueden llevar a la depresión, dificultades en las relaciones interpersonales y una reducción general de la calidad de vida.


Reactividad Aumentada

La reactividad aumentada implica una respuesta exagerada a las amenazas percibidas e incluye síntomas como:

  • Hiperalerta: Un estado constante de vigilancia, buscando posibles peligros.

  • Irritabilidad: Explosiones de ira o frustración por pequeños desencadenantes.

  • Supervisión excesiva: Comprobaciones obsesivas del entorno para garantizar la seguridad.

  • Conductas autolesivas: En algunos casos, el TEPT puede llevar a conductas dañinas como el abuso de sustancias o autolesiones como una forma de manejar el dolor emocional.


Estos síntomas dificultan que las personas con TEPT se sientan seguras y relajadas, interfiriendo significativamente en su capacidad para funcionar en la vida diaria. Por ejemplo, alguien podría evitar dormir por miedo a tener pesadillas o tener problemas para concentrarse en el trabajo debido a la constante preocupación por su seguridad.


Enfoques Terapéuticos para el Trastorno de Estrés Postraumático

  1. Terapia Cognitivo-Conductual (TCC)La TCC se centra en identificar y modificar pensamientos distorsionados y respuestas conductuales negativas asociadas al trauma. Los pacientes aprenden a reconocer patrones de pensamiento disfuncionales y a adoptar estrategias de afrontamiento más eficaces.Las técnicas de la TCC pueden incluir exposición gradual a los recuerdos del trauma, entrenamiento en relajación y desarrollo de habilidades para resolver problemas.

  2. Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares (EMDR)El EMDR es uno de los tratamientos más utilizados para el TEPT, combinando elementos de la terapia cognitivo-conductual con estímulos bilaterales, como movimientos oculares o sonidos alternados. Durante las sesiones de EMDR, los terapeutas guían a los pacientes a través de recuerdos traumáticos mientras se concentran en estímulos bilaterales. Este proceso facilita la reprocesamiento de los recuerdos traumáticos y reduce los síntomas del TEPT.

  3. Terapia NarrativaEste enfoque se centra en construir un nuevo significado y narrativa alrededor de la historia personal del paciente, incluidos los recuerdos traumáticos. Los terapeutas ayudan a los pacientes a explorar y reescribir su historia, destacando la resiliencia y el crecimiento personal.Integrar el trauma en una identidad personal constructiva puede reducir el impacto negativo de los síntomas del TEPT en la vida cotidiana.


Conclusión

En conclusión, el trastorno de estrés postraumático es una condición compleja que puede afectar profundamente a quienes lo padecen.Es importante reconocer que el tratamiento del TEPT requiere tiempo y dedicación, pero con el apoyo adecuado y los recursos necesarios, las personas pueden encontrar alivio a los síntomas, mejorar su calidad de vida y superar los traumas vividos.



Escrito por

Dr Elizabeth Moore, Psicóloga

(consultas únicamente en italiano)

 

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Bibliografía


  • Judith Lewis Herman, Trauma e guarigione: la mente e il corpo nelle cure del trauma, 2000, Cortina Raffaello.

  • Paolo Migone, Stress post-traumatico: teoria, valutazione e trattamento, 2013, Raffaello Cortina Editore.

  • Patrizia Scariati, Stress post-traumatico e terapia EMDR: un approccio integrato, 2018, Franco Angeli.


Recursos externos

Si deseas profundizar en el tema de la manipulación psicológica y explorar artículos y estudios relevantes, considera estas importantes fuentes académicas e institucionales.





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